A veces a todos nos falta motivación y aplazar hasta el día siguiente ciertas tareas. Para tareas sin importancia, el impacto en nuestra vida es mínimo. Pero cuando se trata de cosas urgentes, puede afectar nuestra vida diaria. La procrastinación nos afecta a todos en un área u otra de nuestras vidas. Quien nunca ha dicho » lo haré mañana »Y una vez que llegue el día siguiente, ¡rebelote! Nos convencemos de nuevo de que nos tomaremos el tiempo al día siguiente.
Ya sea para limpiar, ordenar o clasificar papeles, existen buenas razones para posponer estas tareas hasta el día siguiente. Y si miras más de cerca, estas son a menudo las mismas cosas en las que posponemos las cosas. Por tanto, veremos juntos 5 consejos para liberarte de este mal hábito que es dilación.
Índice de contenido
1. Determine el propósito de la tarea en cuestión.
Para evitar aplazar hasta el día siguiente, una de las primeras cosas que hay que hacer es plantearse la pregunta: «¿para qué tengo que hacer esta tarea?» Tienes que encontrar una razón lo suficientemente motivadora para realizar la tarea. Hay miles de razones para realizar daftar slot online una actividad, pero no todas te inspirarán a actuar. Digamos que el abatimiento es una tarea para usted. Si te dices a ti mismo que tienes que hacer esto para mantener tu casa limpia cuando nunca te has preocupado mucho por la limpieza, no harás nada.
Si, por el contrario, opta por hacerlo ahora para no tener que restregar determinadas manchas durante horas, como la última vez que lo hizo procrastinado varios meses, es más fácil actuar. Asimismo, puedo optar por clasificar mi correo y pagar mis facturas ahora para evitar tener que pagar intereses atrasados. Es una motivación lo suficientemente grande como para mover mis glúteos, especialmente si mi presupuesto es ajustado este mes month
2. Cambie su discurso interior para dejar de procrastinar
Uno de los mayores problemas de procrastinar continuamente es la culpa resultante. Esta culpa se traduce en un diálogo interno negativo con frases como » no tengo voluntad «,» Me falta disciplina «, incluso» apesto «o» no sirvo para nada «para los más extremos. Para evitar caer en la trampa de la culpa, tenga en cuenta que no tiene que hacer todas estas cosas. Eres libre de no hacer nada.
Una buena forma de darte cuenta de que eres libre es comenzar por cambiar la forma en que te hablas por dentro. Detén el «debo» y el «debo», más bien favorece «yo elijo».
Al cambiar su habla interior, se sentirá más libre y disminuirá su tendencia a aplazar hasta el día siguiente así como el sentimiento de culpa resultante.
3. Evacuar el miedo al fracaso que fomenta la procrastinación
Dependiendo de la naturaleza de la tarea, es posible aplazar hasta el día siguiente por miedo al fracaso. Ordenar tu casa, ordenar tu armario, retomar el deporte, abordar un tema delicado en pareja, son ejemplos de situaciones en las que la tentación puede ser grande para aplazar. Esto slot es del todo comprensible ya que detrás de cada una de estas actividades hay miedos asociados a ellas: miedo a no llegar, miedo al rechazo, etc. Para tener éxito en la acción, tenga en cuenta que cuando no hace nada, ya ha fallado.
En efecto, mientras no hagas nada para ir hacia lo que es importante para ti, te sentirás frustrado y vivirás como un fracaso el hecho de no haber hecho nada. Entonces, incluso si eso significa fallar, también podrías hacer algo 😉
4. Planifique sus acciones el día anterior para liberarse de la dilación.
Para detener aplazar hasta el día siguiente, debes planificar las acciones que quieres hacer al día siguiente el día anterior. Algunos seguramente me dirán “sí, ya lo he intentado pero no estoy haciendo nada de lo planeado. Y lo entiendo perfectamente. Para remediar esto, el truco está en poner en tu lista acciones sencillas que haces todos los días como hacer la cama, tomar tu café, alistarte, etc. Hacer esto le permitirá al principio del día marcar varias tareas de su lista y sentir rápidamente que ha progresado hacia sus metas diarias.
En esta lista de tareas pendientes, también pondrás la tarea más importante del día, la que te hará sentir que has tenido un día productivo, incluso si solo completaste esa tarea y nada más. Objetivamente, por supuesto, debe poder realizar esta tarea durante el día.
5. ¡Para dejar de procrastinar, es importante recompensarse por sus esfuerzos!
Tómate 5 minutos y haz una lista de 10 acciones que te hagan realmente feliz. Luego evalúa en una escala del 1 al 10 la intensidad de placer que te brinda cada una de las 10 acciones. Mantenga el 5 con las puntuaciones más altas. Tienes frente a ti la lista de acciones que se utilizarán para recompensarte. Todas las tardes o los fines de semana si lo prefieres, te recompensarás por el esfuerzo proporcionado con alguna de estas acciones, según tu deseo del día.
Personalmente, me gusta ver un episodio de la serie por la noche antes de acostarme para recompensarme por los esfuerzos del día. Nuestro cerebro se centra en el placer y en lo útil. Al darle sentido a cada una de tus acciones y recompensarte a ti mismo, tu cerebro estará doblemente motivado para ayudarte ser más eficiente diario.
¡Comparta este artículo con sus seres queridos para ayudarlos a dejar de procrastinar!
Crédito de la foto: Alexandre Vanier / Vitaly / Glenn Carstens-Peters